Religión: Mexica
Categoría: Dios
Advocación: Cielo
Nahual: Ninguno
Consorte: Ninguno
Genealogía: Desconocida
Armas: Desconocida
Hogar: Xochicoatepec
Enemigos: Desconocidos
Tenantzitzimitl es una demonio de la mitología mexica.
Armas: Desconocida
Hogar: Xochicoatepec
Enemigos: Desconocidos
Tenantzitzimitl es una demonio de la mitología mexica.
Fue la líder de las tzitzimimeh y madre de los dioses Ehécatl y Tlacatecólotl.
Etimología
Del náhuatl tenan "Vieja" y tsitsimitl "Persona Enojada". "Vieja Enojada".
Genealogía
Desconocida.
Mitos
Tenantzitzimitl fue la líder de las Tzitzimimeh.
Tenantzitzimitl y Quetzalcóatl
Muy probablemente Tenantzitzimitl dejó de ser una Tzitzimimieh tras tener un amorío con Quetzalcóatl, de cuya unión nacería Ehécatl. Al ser las Tzitzimimeh enemigas de Quetzalcóatl, seguramente habrían exiliado a su líder y ella habría encontrado refugio en el cerro del Xochicoatepec.
Tenantzitzimitl y Tonatiuh
Tenantzitzimitl después tendría un amorío con Tonatiuh en el cerro de Postectitla. De esta unión, en el mismo cerro, daría a luz al dios Tlacatecolotl.
Tenantzitzimitl y sus Hijos
Tenantzitzimitl habría criado tanto a Ehécatl como a Tlacatecólotl en el cerro de Xochicoatepec. En algunos mitos Ehécatl y Tlacatecólotl eran gemelos, sin embargo en otros hay una diferencia de varios Soles entre el nacimiento de uno y de otro.
Mientras que Ehécatl era un hijo responsable que se dedicaba a trabajar la tierra, Tlacatecólotl usaba su magia para poner a otros animales a trabajar mientras él se dedicaba a seducir mujeres. Por esto, Tenantzitzimitl se avergonzaba de Tlacatecólotl y usaba a Ehécatl como ejemplo de cómo debería comportarse.
Por esto, Tlacatecólotl celoso embrujó a Ehécatl para que este partiera hacia las aguas del norte. Tlacatecólotl se arrepintió después y esperó el regreso de su hermano pero Ehécatl jamás volvió.
Tiempo después Tlacatecólotl abandonó Xochicoatepec dejando a su madre sola.
Tenantzitzimitl y Chicomexóchitl
Tenantzitzimitl adoptó en Xochicoatepec a su nieto o nieta Chicomexóchitl, a quien no quería porque era muy traviesa o travieso y porque sabía cómo domar a las fieras. Al no sentirse querido o querida por su familia, Chicomexóchitl decidió marcharse dejando al pueblo cercano en un estado de falta de maíz lo que hizo que todos apreciaran la importancia de aquel alimento.
Esta Chicomexóchitl bien podría tratarse de Chicomecóatl cuando era niña.